El gran secreto de nuestra abuela

Todos los años durante las vacaciones escolares, mis hermanos y primos nos mudábamos desde Ciudad Bolívar al campo cerca de Upata a casa de nuestra abuela materna, quién nos esperaba con los brazos abiertos y las alacenas llenas de cuanto dulce y fruta podía preparar para ese anhelado recibimiento, que se extendía hasta la vuelta a clases y con ello nuestros bolsos y maletas repletos de conservas. Durante esas temporadas la veíamos recoger las frutas y dejarlas al sereno con azúcar y limón, y al día siguiente las pasaba a un enorme caldero que ponía en la cocina a kerosén o en el fogón a leña; mientras nos confiaba su secreto para preparar un buen dulce: "seleccionar buena fruta, no exagerar con el azúcar y usar suficiente limón". Mi mamá, por su parte, también era una gran cocinera y anfitriona; siempre tenía invitados y ofrecía cenas en nuestra casa de Ciudad Bolívar. En cambio, a mi papá no le gustaba nada dulce, y prefería los platos salados como: sancochos, carnes y vegetales; y guardaba una receta de yogurt con frutas de la tía Paula, reconocida por preparar todo vegetal en conserva. Y los años transcurrieron mientras disfrutabamos de la sazón de nuestras mayores, desarrollamos el gusto por cocinar teniendo cada quien su sazón o plato que lo distingue y nos transporta a recordar aquellos sabores. Desde siempre hemos disfrutado el placer de compartir, reunirnos y organizarnos de tal manera que preparamos y envasamos memeladas, tomates, berenjenas, pimentones, quesos, salsas, encurtidos, frutas confitadas, tortas, galletas y lo que caiga en nuestras manos. Cuando llega la navidad muchas de estas actividades ya están listas. He allí que en estas fechas comenzamos regalando e intercambiando conservas entre nuestros amigos y familiares de familares, con lo que se creó una demanda de encargos de conservas para sus reuniones o eventos especiales que nos llevó a emprender la cooperativa Grüber Konfit. Hace más de ocho años que nos instalamos en la Colonia Tovar, desde donde elaboramos una variada de gama de productos gourmet que preparamos artesanalmente (ver Land Houser Klub) siguiendo el gran secreto de nuestra abuela